Hoy te quiero hablar de 13 errores de venta muy importantes, que se
pueden trabajar y subsanar con muy poco esfuerzo, si los estudiamos y
nos planteamos ciertos hábitos y procedimientos. Hoy te quiero hablar de 13 errores de venta muy importantes, que se pueden trabajar y subsanar con muy poco esfuerzo, si los estudiamos y nos planteamos ciertos hábitos y procedimientos.
¡Nuestro valor diferencial es lo único que somos!, si, no somos nada más para el mercado. El ruido, la velocidad, y los constantes giros que da la realidad nos hacen invisibles para los clientes si no sobresalimos. Sólo si somos capaces de sonar a música, de aportar color, o de ser luz para los demás, seremos considerados.
En el año 1998, en un lugar que se llamaba “Il Caffé di Roma”, en el puerto de Alicante, conocí a una chica que se llamaba Begoña, muy alta, delgaducha, pero a mí aquella noche me pareció muy guapa, quizás más interesante que guapa…, pero bueno, eso es lo de menos. El caso es que mi interés por ella me llevó a hacerle un seguimiento cercano, organizado, y sin desaliento, hoy, estoy casado con ella, tenemos dos hijos, y llevamos 23 años juntos.
Voy a compartir contigo mi opinión acerca de lo que es vender, desde la experiencia, pero también desde el corazón. La venta es como un poliedro de muchas caras. Pero es un poliedro irregular, donde hay una cara que destaca sobre el resto. Esa cara es la cara humana.
Pensarás, “¡ya está otra vez este hombre con sus historias! Pero, ¿cómo se atreve a decir que Vincent Van Gogh, un artista que pintó más de 900 cuadros, y cuenta con más de 1600 dibujos sólo vendió un cuadro?.”
Van Gogh no sólo cuenta con esa impresionante cantidad de obras, sino que además no hay quien ponga en duda que es uno de los pintores más importantes de la historia.
Vivimos tiempos difíciles, sin lugar a duda tiempos que son una invitación a la reflexión. Nos enfrentamos desde hace años a profundos cambios en lo económico y en lo social, que han derivado en un auténtico cambio en las reglas del juego.
Nos encontramos con entornos tremendamente volátiles, donde hay mercados con más oferta que demanda. Con unos ciclos de vida de productos y servicios muy cortos, y donde el comportamiento del comprador ha pasado de ser un mero receptor de ofertas a ser investigador y entusiasta.