“Reírse es arriesgarse a parecer tonto.
Llorar es arriesgarse a parecer sentimental.
Alargar el brazo para coger a otro es arriesgarse
a implicarse.
Mostrar los sentimientos propios es arriesgarse
a mostrarse uno mismo.
Exponer tus ideas o sueños ante una multitud
es arriesgarse a perderlos.
Amar es arriesgarse a no ser correspondido.
Vivir es arriesgarse a morir.
Tener esperanzas es arriesgarse a perderlas.
¡Pero se tienen que correr riesgos! Porque el
mayor peligro en la vida es no arriesgar nada.
Si no haces nada, si no arriesgas nada, tu existencia
se oscurece.
Es probable que de este modo evites sufrimientos,
pero no vas a aprender, a sentir, a cambiar, a amar,
ni a vivir.
Encadenado a una actitud de miedo, uno se convierte
en esclavo…y pierde su libertad.
Solo eres libre si arriesgas.”
(La brújula interior, de Álex Rovira)
No hay otro camino en la vida para superarse, que arriesgar.
Nos pasamos la vida esperando el momento perfecto para hacer algo, y ese instante, da la sensación de que no llega nunca.
Nos pasamos la vida aprendiendo, intentando comprender las reglas del juego, pero nunca terminamos de estar seguros. El fin último de la vida no es la formación, es la ACCIÓN, porque es ahí donde sucede todo.
Le llamamos parálisis por análisis, pero yo creo que analizamos más nuestros miedos que los datos. No somos inconscientes, pero justo desde esa consciencia del miedo, es desde donde nacen las razones más fuertes para no arriesgarnos.
Que nuestro presente no limite la importancia de nuestro propósito, depende de nuestra actitud. En mi opinión, el camino para perder el miedo, parte de visualizar nuestro objetivo como algo tan grande, que nuestros miedos se queden pequeños.
Somos emprendedores, vendedores, gente de acción, vivimos apasionados por las cosas, vivimos las cosas con corazón. Tenemos que trabajar para que no haya ni síndrome de impostor, ni sombra del pasado que nos frene la ilusión, porque es, justo en ese sentimiento, donde todo tiene sentido, donde sin duda, aparece nuestra vocación.
Arriesgarse es el único camino en la vida para superarse.
Atreverse a ofrecer tu producto o servicio es la única forma de vender.
Ya sabes, soy un apasionado por el lado humano de la estrategia de venta.
Me tienes a tu lado para acompañarte a alcanzar tus objetivos comerciales.